Search
Close this search box.

Dios Madre

La Madre Jerusalén

Jerusalén Celestial, Nuestra Madre

En el libro del Apocalipsis, Dios Madre aparece como la Jerusalén Celestial y la Novia del Cordero. Aquí, la Biblia también explica que Ella está dando a las personas el agua de vida en los últimos días.

"Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin. Al sediento le daré gratuitamente de la fuente del agua de la vida. ... Yo seré su Dios y ellos serán mis hijos.”

A lo largo del Antiguo y Nuevo Testamento, la Biblia nos enseña que solo Dios puede otorgar el agua de vida a su pueblo. Eso es porque el agua de vida representa la vida eterna.

"En el último y más importante día de la fiesta, Jesús se puso en pie y exclamó con voz potente: 'Si alguien tiene sed, venga a mí y beba."

Sin embargo, en el libro del Apocalipsis, no solo es Dios Padre quien ofrece el agua de vida. Dios Padre está acompañado por Su Novia. Y juntos, están otorgando a las personas la vida eterna.

"El Espíritu y la esposa dicen: '¡Ven!' ... tome del agua de la vida gratuitamente."

Apocalipsis 22:17

Para llevar a cabo esta obra, la Novia ha descendido del Cielo como la Santa Ciudad Jerusalén, que es nuestra Madre.

"Uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las últimas siete plagas, vino y me habló, diciendo: 'Ven, te mostraré a la esposa, la esposa del Cordero'. Y me llevó en el Espíritu a un monte grande y alto, y me mostró la santa ciudad de Jerusalén, que descendía del cielo, de Dios."

La novia, la esposa del Cordero, es descrita como la Jerusalén Celestial. La Biblia explica en el libro de Juan que Jesús es el Cordero (Jn 1:29). De la misma manera, la Biblia nos deja saber quién es la Jerusalén de arriba.

"Pero la Jerusalén de arriba es libre, la cual es madre de todos nosotros."

El apóstol Pablo testificó a los miembros de la Iglesia primitiva acerca de la Madre Jerusalén. Él les explicó que ella estaba en el Cielo. Sin embargo, en el libro del Apocalipsis, que representa nuestro tiempo, la Madre Jerusalén ha venido a la Tierra para ofrecer a todas las personas el agua de vida, la vida eterna. Sin acudir a la Madre Jerusalén, no hay otra forma de recibir el agua de vida en los últimos días.

Aprende más sobre la Madre Jerusalén en la Biblia.